REMA – ACPP (Red
de Medios Alternativos – Agencia Colombiana de Prensa
Popular)
Conmovedor Saludo desde Prisión de
Huber Ballesteros para la II Escuela de Dirigentes del Oriente Colombiano,
Escuela Pedro Nel Jiménez, MUCAPOC
Desde la cárcel La Picota el destacado
dirigente popular colombiano Huber Ballesteros detenido en los días más álgidos
del Paro Nacional Agrario y Popular en Colombia en
el mes de agosto, envió un saludo desde la prisión a la II Escuela de
Dirigentes del Oriente Colombiano, organizada por la Escuela Permanente de
Formación Popular Pedro Nel Jiménez y la MUCAPOC.
En su carta, envía un fraternal saludo
a las mujeres y hombres del oriente colombiano, y manifiesta la seguridad y el
orgullo que significa el luchar al lado de compatriotas que demuestran su
coraje a cada paso, reafirmando así la confianza en el triunfo del
pueblo: “Ni la cárcel, ni la muerte de algunos de nosotros detendrán el
torrente popular que avanza incontenible en busca de la justicia, la paz y la
libertad”
Hace exactamente un año en diciembre
del año 2012, el dirigente popular participó en la I Escuela profundizando en
el tema de partidos políticos en Colombia, luchas sociales y populares para más
de 90 asistentes.
Hoy en su misiva Huber Ballesteros
exhortó a que los estudiantes de la Escuela Pedro Nel Jiménez en su mayoría
venidos de las regiones continúen esforzándose para ser conductores de la causa
popular.“La lucha por la libertad no es una quimera es una necesidad, un
deber de todo buen patriota”.
Afirma también: “El régimen
decidió arrancarme temporalmente de la primera
línea de la lucha popular, sin embargo no doblegará
mi espíritu, ni logrará que reniegue de mis principios, me considero un
revolucionario y lo seré hasta mi último aliento de vida”
A continuación la carta completa de
Huber Ballesteros:
Bogotá, cárcel La Picota 30 de
noviembre 2013
Compañeras y Compañeros:
Participantes Escuela de Formación
Política MUCAPOC
Fraternal saludo
Desde el lugar donde me encuentro
prisionero por el régimen, extiendo un abrazo a todos y a todas mujeres y
hombres valientes del oriente colombiano. Siento hoy la nostalgia de no poder
compartir con ustedes en esta escuela como lo hice en la anterior. Felicito el
esfuerzo de estudiantes y organizadores.
He tenido la oportunidad de compartir
con ustedes varias actividades y puedo dar fe de su dignidad y entrega en la
causa de la justicia social.
Luchar al lado de mujeres y hombres
como ustedes; lo hace a uno sentirse seguro, confiado en el triunfo del pueblo
y orgulloso de poder compartir con personas que demuestran su coraje a cada paso.
El régimen decidió arrancarme
temporalmente de la primera línea de la lucha popular, sin embargo no doblegará
mi espíritu, ni logrará que reniegue de mis principios, me considero un
revolucionario y lo seré hasta mi último aliento de vida.
Ni la cárcel, ni la muerte de algunos
de nosotros detendrán el torrente popular que avanza incontenible en busca de
la justicia, la paz y la libertad.
Desde aquí los acompaño como otras
veces los he acompañado de cuerpo presente. Desde la prisión veo con
satisfacción como el deseo de superación permanece en ustedes. La lucha
directa, práctica, alternada con la teoría de los cursos, seminarios y
escuelas irán forjando la dirigencia que la causa popular necesita. Ustedes
tienen el deber de recoger las banderas de los que caen en la lucha y de
quienes estamos prisioneros y prisioneras.
La lucha por la libertad no es una quimera es una necesidad, es un deber de todo buen patriota. Ustedes los del oriente, los valientes Llaneros y Llaneras, han demostrado en cada época de la historia que son de los mejores.
La lucha por la libertad no es una quimera es una necesidad, es un deber de todo buen patriota. Ustedes los del oriente, los valientes Llaneros y Llaneras, han demostrado en cada época de la historia que son de los mejores.
Me resta desearles muchos éxitos.
Aprovechen al máximo este esfuerzo, para que sean cada vez mayores dirigentes y
conductores de tan hermosa causa.
Desde la prisión los acompaño,
esperando más temprano que tarde, romper estas cadenas, abrir estas rejas y
colocarme de nuevo al lado de ustedes para seguir batallando, por la libertad.
Con un gran abrazo
Su compañero de todas las luchas.
HUBERT
BALLESTEROS